El interés por el estudio de la cohesión social posee una larga trayectoria tanto académica como también desde el Estado y de organizaciones con interés público. La cohesión social aparece como una aspiración normativa de una sociedad mejor, vinculada a conceptos como lazos sociales de calidad, pertenencia, y confianza en los demás y en el Estado. Se asume también que un estado de adecuada cohesión social es producto de condiciones estructurales y políticas que apunten a mayor igualdad, integración y oportunidades, por lo cual muchas veces se refiere a ella como un horizonte o una consecuencia de buenas políticas sociales. Sin duda este horizonte normativo reaparece hoy con fuerza en tiempos caracterizados por crisis económica producto de la pandemia, polarización política, y la extrema concentración de ingreso y privilegios que caracteriza las sociedades actuales y donde el caso chileno claramente no es una excepción.